«No se permitirá que una misma empresa tenga horarios contiguos». Esta frase, bien ubicada dentro de las bases para la subasta de frecuencias de la ruta ferroviaria Cusco-Machu Picchu, sería la solución de Ositran para permitir que las compañías Andean Railways e Inka Rail accedan al uso de la codiciada vía, que por ahora es trabajada únicamente por PerúRail.
Con dicha salida legal, la compañía acusada de monopolio (PerúRail) tendría que ceder al menos la mitad de las frecuencias que hoy opera, según un informe que publica el suplemento Día1 de El Comercio.
Así -de acuerdo a la nota- se abre una nueva esperanza para Andean Railways e Inka Rail, compañías que hace algunas semanas sufrieron un duro revés en su lucha por operar la ruta Cusco-Machu Picchu, cuando Ositran ratificó la legalidad de la participación de PerúRail en la nueva y controversial subasta de frecuencias.