Con el fin de convertir a Apurímac en un destino turístico alternativo al Cusco y, a la vez, complementarse, ambos gobiernos regionales suscribirán en octubre próximo un convenio para diseñar proyectos de este sector que contribuyan a incrementar el flujo de visitantes hacia esta parte del país.
Roni Méndez Soto, titular de la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo (Dircetur) de Apurímac, señaló que la suscripción de este convenio permitirá generar más puestos de trabajo y, por ende, mejores condiciones de vida para la población.
“Este convenio nos permitirá impulsar el circuito turístico Nasca – Apurímac – Cusco, el cual será ofertado por empresas privadas con el respaldo de ambos gobiernos regionales”, comentó a la Agencia Andina.
Agregó que el convenio contempla el desarrollo de proyectos destinados a promover el desarrollo turístico, principalmente de Apurímac, con el apoyo de la empresa privada.
“Apurímac cuenta con una variedad de los atractivos turísticos. El visitante puede disfrutar de bellos paisajes, monumentos arqueológicos y otros de carácter natural”, indicó el funcionario.
Entre los principales atractivos de Apurímac destaca la calle Miscabamba, considerada una de las más antiguas de Abancay; y el parque Micaela Bastidas, construido en la época de la Independencia.
También la casa del ex presidente del Perú David Samanez Ocampo, declarada monumento histórico; el mirador de Usnomocco, en el distrito de Tamburco; y el parque ecológico de Taraccasa.
Otros atractivos turísticos son el santuario nacional del Ampay y el conjunto arqueológico de Saywite, en la provincia de Abancay; y la fortaleza de Choquequirao, que comparte con el Cusco.
“Asimismo, contamos con los baños termales de Cconoc, Kilkata y Ccocho, en la provincia de Antabamba; así como los bosques de titankas o puyas de Raimondi y queñua, en la provincia de Aymaraes que cuenta también con los baños termales de Pincahuacho”, añadió.
También destaca el cañón del Apurímac, donde se practica turismo de aventura; así como la cárcel de piedra de Cotabambas y la laguna de Pacucha, en Andahuaylas, entre otros.