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La costa de Arequipa, escape de ensueño

Llegó el verano. Nuestros pies tocarán la tan ansiada arena, nos broncearemos con los cálidos rayos del sol y nos bañaremos en el mar, tal como deseamos todos estos meses. Las playas son, sin duda, el destino favorito de muchos viajeros en esta época y la costa de Arequipa no se puede quedar atrás. Déjese llevar por los encantos que esta encierra.

Si ve un mapa del litoral arequipeño, observará que la principal parada es el puerto de Mollendo. Desde aquí, es recomendable moverse hacia el sur para conocer las demás playas y luego ir subiendo hasta Mejía.

A cualesquiera de esos dos puntos se llega en bus desde Arequipa en dos horas y media aproximadamente. Sin embargo, lo más recomendable es pedir un pasaje directo hasta Mollendo, puesto que ese lugar cuenta con más opciones de hospedaje, así como agencias de bancos y restaurantes.

Ese distrito, perteneciente a la provincia de Islay, está ubicado en el Km 957 de la Panamericana Sur (a 15 minutos de Mejía). Desde Arequipa, las unidades de transporte parten a cada hora. Las empresas de transporte más conocidas son Del Carpio y Santa Úrsula.­

ENTRE VALLES
Una vez en Mollendo, puede tomar un taxi o colectivo que lo llevará a Mejía. En el camino verá plantaciones de cebollas, ajos y arroz. Cuando llegue a su destino notará que se trata de una zona residencial con casas antiguas y modernas, que guardan la estética de todo balneario: amplias terrazas y techos altos. Despreocúpese, la playa es pública, pero como le adelantamos, no hay hospedajes por lo que la mayoría de visitantes opta por pasar el día y luego retorna a Mollendo. La otra opción es alquilar una casa de playa para todo un fin de semana.

Sepa que Mejía tiene una plaza, parques y todo está bien mantenido y limpio. Luego de bañarse, puede darse una vuelta por allí o visitar el Santuario Nacional de Lagunas de Mejía, hábitat de una cantidad importante de aves.

Otra opción es merodear por los pueblos que le siguen. Uno de ellos es La Curva, que resulta una parada obligada. ¿Adivinen por qué? Un antojo tiene que ser. En este lugar se encuentra la casa de la familia Vildoso Juárez, cuyos miembros desde hace más de dos generaciones elaboran los famosos ‘voladores’, alfajores rellenos con miel o manjar blanco. El paquete pequeño está entre S/.4 y S/.4,50 y el grande entre S/.8 y S/.9, según el sabor que elija. No necesita dirección, solo pregunte a cualquier transeúnte.

SORPRESAS EN LA RUTA
Ya de vuelta en Mollendo, y como segundo día playero, dese una escapada a la caleta Catarindo, a solo cinco minutos. Un taxi puede llevarlo, solo asegúrese de llamar a otro para el retorno. Se trata de una playa pequeña y tranquila, en donde chapoteará a su gusto. Además, como existen restaurantes en la zona disfrutará un buen plato ni bien salga del mar. Hay varios puestos, pero el más cómodo por sus instalaciones es Charlie’s. Su dueño le dará la bienvenida con una carta muy variada, donde el precio promedio de los platos es de S/.25.

Es momento de seguir con la ruta hacia el norte. Allí están las playas que de seguro le suenan más: Camaná y Ocoña. Pero antes de llegar a ellas, no se querrá perder la experiencia de visitar la caleta San José, un lugar paradisíaco que empezó con una empresa llamada Inca Scallops, dedicada a la crianza de conchas de abanico, que posteriormente y por el gran amor que sus socios le tenían al mar, pasó a convertirse en un lugar turístico.

Actualmente, la caleta San José cuenta con un albergue que cuenta con los servicios básicos (agua, desagüe, energía), dormitorios, baño y cocina. La capacidad total es de 28 personas. Ojo, solo se puede llegar por mar desde el puerto de Quilca (altura del Km. 845 de la Panamericana Sur) y previa reserva. La empresa maneja paquetes de varios días, pero para que disfrute verdaderamente del lugar unos cinco días son recomendables. Las actividades que puede realizar son cabalgatas, buceo, paseos en kayak y trekking y otras actividades.

Subiendo, seguimos hacia Camaná que cuenta con pocas playas que podrá recorrer en auto en pocos minutos. Los servicios son básicos, en temporada podrá encontrar restaurantes y vendedores ambulantes. Pero si va a permanecer más de un día, una buena opción de hospedaje sigue siendo el que fue su Hotel de Turistas. Una vez instalado, camine hasta el mirador del Inca, desde donde podrá apreciar la desembocadura del río Camaná.

Finalmente y a solo una hora de distancia de Camaná, se encuentra Ocoña. Para llegar allí, hay colectivos desde el mercado principal. Ya en el auto, podrá apreciar en el camino verdes valles donde se cultivan arroz y frejoles. ¡Ah! Y para los amantes del camarón, sepa que la actividad que más caracteriza a esta zona es la extracción de esos crustáceos: su concentración en el río Ocoña es alta y generosa.

No olvide que la veda es del 1 al 31 de marzo, pero en sus restaurantes siempre podrá encontrar otros deliciosos platos elaborados a base de pescado y lapas, como los que ofrece Selva Alegre. Aquí Idaluz Ortega y esposo lo engreirán con la sazón que los caracteriza desde 1958.

Allá vamos
Alfajores Vildoso: Calle Las Mercedes 121 de la familia Vildoso Juárez. (054) 554-027

Restaurante Charlie’s: En la caleta Catarindo 95863-8549 / (054) 709-702

Caleta San José: www.caletasanjose.com
95996-210. Mail: reservas@caletasanjose.com

Terminal Terrestre de Arequipa: Calle Jacinto Ibáñez, S/N- Parque Industrial (054) 42-7792

Restaurante Selva Alegre: En el sector del puente Ocoña. (054) 587-138 / 958-224-650

Ex Hotel de Turistas de Camaná: Av. Lima 138. (054) 571-113. www.hoteldeturistas.net




Por: Fiorella Carrera – Vamos!