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Hoteles de lujo en Urubamba

ARANWA VALLE SAGRADO

Esta singular propuesta puede sorprendernos por la imponente capilla andina enclavada en medio de la instalación. O tal vez por su galería de arte que exhibe cuadros de Humareda y Gerardo Chávez como antesala a un orquideario. O también por su barra de sushi que incluye rolls con alpaca y quinua. Sin embargo, más allá de todo esto, lo que es su principal propuesta es la de ser el primer y principal hotel no solo del valle sino del Perú dedicado al turismo de salud.

Como muestra de ello están los 2.500 m2 del spa Hamay, dentro de los cuales podrá encontrar tres piscinas de hidroterapia, ducha vichy, sala de yoga, cámara hiperbárica, solarios, cuartos de relajación con oxígeno y propuestas más que originales, como una sala de sonido del agua, ideal para la meditación, y un sauna inca, en el cual las personas ingresan a una habitación de barro con piedras calientes, hojas de coca y eucalipto en medio de una ceremonia que organiza un guía espiritual.

En cuanto a los alojamientos, el hotel cuenta con 100 habitaciones, las cuales están divididas en dos grupos. Las primeras forman parte de lo que era la antigua casona Yaravilca, la cual ha sido cuidadosamente remodelada de forma tal que mantiene el estilo de ese Cusco colonial que tanto conquista a los extranjeros (y a muchos peruanos también). El resto de habitaciones tiene un concepto más moderno, ideal para quienes acuden a eventos corporativos. Además, se cuenta con 15 suites de lujo y una imponente suite presidencial rodeada por un lago artificial.

Aunque la inauguración oficial del Aranwa Valle Sagrado está programada para dentro de un par de meses, el hotel ya está operativo y haciendo los últimos ajustes de rigor (se ha habilitado un cine con todo y carrito de pop corn para quienes vayan con sus hijos). La capilla El Señor de los Vientos cuenta con un altar hecho íntegramente en pan de oro, cuadros de la escuela cusqueña y un órgano de tubos traído desde Europa. Y quien quiera puede reservarla para realizar allí su matrimonio. Otra de las novedades que se vienen terminando son un restaurante vegetariano y una cocina andina tradicional, con hornos de barro y fogones, que operará bajo reserva, tanto para cenas costumbristas como para noches de pizzas. Y puede amanecer pescando al borde del río, pues cuentan con los equipos necesarios para entregarse a esta actividad.

SOL Y LUNA HOTEL Y SPA
A diferencia de los anteriores, esta no es una propuesta nueva, sino más bien la primera que incorporó en el valle el concepto de habitaciones exclusivas y tratamientos de belleza y relajación. Abrió sus puertas el año 2000 con 14 búngalos, número que rápidamente se dobló debido a la buena acogida. Sin embargo, para estar a tono con la demanda actual, para diciembre de este año tendrá 15 casitas de lujo nuevas y abrirá Wayra, una nueva propiedad que funcionará independientemente y estará abierta a todos los visitantes del Valle Sagrado con propuestas de gastronomía, entretenimiento, cultura y actividades al aire libre.

Estas casitas no son para nada pequeñas. Cinco de ellas cuentan con 120 m2 y jacuzzi personal y las otras 10, con 108 m2. Todas tienen su propio jardín y terraza privada. Los precios oscilarán entre los US$600 y los US$800 la noche. Los búngalos standard (de la primera etapa) cuestan US$200 la noche.

Para Sol & Luna, la experiencia para el visitante no se limita a un entorno que está en perfecta armonía con la naturaleza, sino que hay que cautivarlo a través de todos los sentidos, por ello es que le han dado especial importancia a la gastronomía. La carta del hotel usa un 90% de insumos de la zona y ha sido especialmente diseñada por el chef Pedro Miguel Schiaffino para ofrecer una propuesta novedosa, pero que sea fácil de digerir en condiciones de altura.

Otro detalle importante del hotel es la tienda Kunata Wasi, donde se ofrece arte popular. Cada pieza tiene tradición, historia y un valor agregado de diseño, además de alta calidad de manufactura. Todo esto ha podido ser apreciado por turistas de diversas nacionalidades, dentro de las cuales se cuenta con personalidades como el diseñador Calvin Klein y el cantante Miguel Bosé. Finalmente, el hotel inaugurará en diciembre del 2009 una sala de usos múltiples llamada Nina, con capacidad para 150 personas.

RÍO SAGRADO HOTEL/ VILLAS /SPA
Como un homenaje a ese venerado cauce que discurre frente a ellos, todos los ambientes de este lujoso hotel están rodeados por un elemento en común: el agua. Desde que llegamos a la recepción y mientras bajamos escalinatas de piedra y caminamos por las instalaciones, siguen nuestros pasos canales que permiten que ese inigualable sonido nos acompañe hasta dentro de las habitaciones. Y es que ese es el principal objetivo del Río Sagrado: lograr que los visitantes alcancen la máxima relajación.

La propiedad está enclavada a orillas de una curvatura del río Urubamba, a 3,2 kilómetros del pueblo bautizado con el mismo nombre. Buscando exclusividad y máximo confort posee solo 21 suites y 2 villas, cada una equipada con baños y terrazas con vista al río. La construcción de cada uno de los ambientes mantiene la arquitectura andina con vigas de madera rústica, lo cual se fusiona con moderno mobiliario europeo, piezas de murano en los baños y detalles étnicos con productos oriundos de la zona.

Como dijimos anteriormente, luego de registrarse en la recepción usted empezará a descender hacia el río y descubrirá que las suites están distribuidas a lo largo del extenso terreno de manera tal que no tienen mucho contacto entre ellas. Al llegar al nivel del río se topará con el restaurante El Huerto y el bar La Cava, donde debe probar el coctel de la casa, que incluye sachatomate y pisco. La carta es internacional y pensada en no exigir demasiado la digestión de un visitante que quiere hacer paseos o simplemente tomar el sol o maravillarse ante el cielo lleno de estrellas tumbado en una de las varias poltronas colocadas al pie del Urubamba.

Finalmente, en medio de toda la instalación destaca el spa Mayu Wilka, el cual aparece ante nuestra vista acompañado de dos “pakllas” (caídas de agua). Dentro de la actual tendencia de cuidado del cuerpo, tan en boga en el turista extranjero, el spa ofrece diversas opciones de masajes, tratamientos faciales y tratamientos de cuerpo.

Pero si lo que busca es algo más relajado, le recomendamos el jacuzzi dual. ¿En qué consiste? Se trata de una tina de hidromasajes exterior e interior dividida por un gran ventanal. Así podrá experimentar el tomar una copa de champán bajo el manto de miles de estrellas para luego pasar al sauna de hojas de eucalipto para terminar de olvidarse del estrés cotidiano.

Para quienes quieran algo más de acción, el hotel organiza caminatas a los pueblos del valle con guías especializados. También puede animarse por algo más cargado de adrenalina como la bicicleta de montaña, paseos a caballo y el infaltable canotaje por las aguas del Urubamba. Y entre los próximos planes figura la creación de un minicampo de golf y fijar un globo aerostático para los más avezados. Como ven, piensan en grande.