Buena noticia saber que se están repatriando piezas arqueológicas al lugar donde pertenecen. Aunque esto impide que sean apreciadas por amantes de la cultura inca quienes residimos lejos de Perú. Es una buena excusa para visitar este país.
Otra opción sería llevarlas en forma de «tour arqueológico» por museos de otras latitudes pero dandole prioridad a su sitio de origen. Algo similar se hizo en Colombia con las piezas muiscas del museo del oro en Bogotá.